Si quieres algo, ve a por ello y punto.

Ese momento en el que sabes que es ESA persona. Ésa y nadie más. Parece como si el curioso péndulo del destino os hubiese tocado y simplemente sabes que esta vez lo has encontrado: Todo lo que jamás habías soñado, lo que siempre querías en tu corazón, en lo más profundo de tu subconsciente, lo que nunca supiste que eras capaz de sentir. Tal vez sea justamente en el sitio menos adecuado, el día menos optimista, el momento menos apropiado. Tal vez creas que ha sido pura coincidencia, algo sin importancia, pasajero, que esa persona nunca se convertiría en algo más que un conocido, nunca llegarás a saber más que su nombre. Total, nunca te has fijado antes en esos tipos. Pero no. A veces, el destino tiene sus propios planes.

...Sólo hay una manera

A veces hay que tomar el camino fácil. No tiene ninguna explicación lógica, tal vez tampoco de mejor resultado, ni es el que queríamos desde un principio, ¿por qué entonces elegimos ese? simplemente porque. . . . .es fácil.

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Le buscaré las cosquillas al destino. Tal vez luego bailemos un rato el vals al ritmo de mi risa.

El hoy es el nuevo pasado.

Y hoy yo me pienso reir de la prisa, que le tengo pillado el truquillo.
Hoy la monotonía se convertirá en un cóctel de sensaciones. Hoy llegó el futuro.

Historias nuevas.

Ya no nos quedan finales para este cuento. Hagamos de él una leyenda que sea recordada hasta el fin de los tiempos, sin saber si realmente algún día ocurrió.

Salta.

Si me he caido es porque he saltado. Y saltar vale la pena, aunque te caigas.

Si las llamas fueran de agua

Si las llamas fueran de agua, si el azúcar fuera salado, si el mar fuera tranquilo, si el cielo fuera verde, si las flores no tuvieran color, si los peces volaran, si el hielo ardiera... Si no hubieras aparecido... Que poco sentido tendría el mundo ¿verdad?

El error de muchas personas para evitar que lastimen su corazón, es actuar como si no lo tuviesen.

Cuando un cristal o un plato se rompe genera sonido de algo rompiéndose. Cuando una ventana se hace añicos, la pata de una mesa se rompe, o se cae un cuadro de la pared hace ruido. Pero cuando tu corazón se rompe, el silencio es total. Es algo tan importante que piensas que su ruptura hará tal ruido que se oirá en todo el mundo, o sonará como un gong o un timbre. Pero simplemente hay silencio y entonces es cuando desearías que hubiese algún sonido que distrajese tu dolor.

Si lo hay, es interno. Es un grito y nadie puede oírlo, solo tú. Es tan alto que tus oídos pitan y tu cabeza duele. Es tan salvaje, como una herida abierta expuesta a agua marina, pero cuando realmente se rompe, solo se oye el silencio. 

Gritas en tu interior, pero nadie puede oírlo...

Los verdaderos amigos se pueden contar con los cinco dedos de la mano.

A veces no nos damos cuenta de las cosas hasta que ya está todo perdido... Esta vez no, este vez me he dado cuenta antes. Quiénes son los verdaderos amigos, quiénes son los que valen la pena, quiénes son los falsos y quiénes jamás debería haber conocido.
Menos mal. Gracias a aquellas personas que siempre están ahí por ser como son. Y gracias a aquellas personas que han venido para hacer daño de haberme abierto los ojos tan pronto. Ahora tal vez iré con una mezcla de miedo, inseguridad y desconfianza por la vida, pero siempre recordando que los que de verdad valen, siempre me quedarán, siempre van a estar ahí, para siempre y por siempre, porque esos son los que de verdad se pueden llamar AMIGOS.

Está escrito

Dicen que el camino más corto entre dos puntos es la linea recta. Pero, ¿qué pasa si el camino esta bloqueado?. Cuando los sedimentos obstruyen la corriente de un río, se desvía… zigzagueando en vez de seguir un curso recto. Lo que para la gente puede parecer serpenteante, para el agua, es el camino mas eficiente desde el nacimiento hasta la desembocadura. La Naturaleza encuentra un desvio.

Yo me niego a creer que las cosas sean simple casualidad, sino que cualquier movimiento, pensamiento, cualquier acontecimiento, el primer rayo de sol por la mañana, la infinitud de estrellas, el hecho de que un metro llegue tarde, de que estés en un lugar concreto para tropezarte con alguien, que se te caiga una moneda al suelo y te pares... tiene su porqué, TODO tiene una razón y el universo maneja los hilos y las piezas del rompecabezas para que nos lleve a donde debemos estar. 

Cuando dos puntos están destinados a tocarse pero una conexión directa es imposible… el universo siempre encontrara otra manera.

Todo tiene una razón, todo tiene un porqué: Está escrito.

Puta distancia.

Eso es todo.

Amar y otras imposibilidades

Es imposible.

Siempre se dice, siempre se ha dicho y siempre se dirá. "No, no lo voy a intentar, es imposible", "No lo hagas, es imposible", "No me atrevo, es imposible". Pero ¿qué es una cosa imposible? Hace unos 100 años lo imposible era volar cómo pájaros. Hasta 1969 lo imposible era que un hombre pusiera su pie en la luna. Hace unas décadas escalar la montaña más alta del mundo era "imposible". ¿Y ahora? Cada día viajan miles de personas en avión. Pisar la luna ya parece algo normal, ahora vamos a por marte. Escalar el Everest ya no es nada especial.
Si todo lo que se decía que era imposible, se ha hecho... ¿Por qué ahora no? Por miedo. Miedo a fracasar. Si el primer hombre que voló, hubiera tenido miedo a caerse...Seguiría siendo imposible. Si Neil Armstrong al intentar pisar la luna, hubiera tenido miedo... Seguiría siendo imposible. Si ahora no te atreves, todo será imposible, o al menos te lo parecerá. Así que intentalo, escala el Everest, tirate y vuela por los aires... hasta llegar a la luna. Qué más da si te caes, la vida es un papel en blanco. Si te equivocas, empieza de nuevo....

Para algo existen las gomas de borrar, ¿no?

PD: No hay amores imposibles, sólo personas incapaces de luchar por el suyo.

Acuérdate.

Recuerdas? Esas risas, las miradas... Claro, claro que lo recuerdas, lo sé. Aunque no quieras lo recuerdas, todos los días... Esos ojos de un desconocido por la calle que te recuerdan a los suyos; esa camiseta que ves colgada en una tienda que te recuerda a aquella que llevaba; esa canción que escuchas en el coche, vuestra canción; ese olor característico que al pasar por una perfumería te lleva a esos recuerdos; Esas palabras de una persona que podrían ser exactamente las suyas. Lo recuerdas, todo. 

Lo importante es cuándo lo recuerdes. Mirándole ahora a los ojos, a otro, a ÉL. Con esos ojos, que no puedes imaginar cómo antes te podían gustar otros, que parecen esconder todo un universo. Esa camiseta que le queda mejor que a cualquiera. Esa canción que suena en la radio del coche, que te trae malos recuerdos, pero da igual, estás ahí en SU coche, pasa de canción, sabes que ahora otra melodía suena en tu corazón. Y ese olor a paraíso que inunda tu alrededor cada vez que lo ves. Sí, recuérdalo todo. 

Recuérdalo tal cuál era, imperfecto, nada comparable a ahora.

Hazlo.

Sí, o no. Tal vez. O, ¿no?... No, no puedo hacerlo... Pero quiero. Quizás ¿Y si no es lo correcto? Puede ser... ¿Y si sí lo es? Miles de preguntas, y a veces sólo hay una respuesta

¿Tienes dudas sobre caminar hacia delante? Hazlo. ¿No sabes si decidir con el corazón? Hazlo. ¿No sabes si vale la pena? Hazlo. ¿Será un error? Hazlo. ¿Temes las consecuencias? Da igual: Hazlo.

tal vez todos necesitemos un día del "Hazlo"...

Simplemente no pensar, darle al interruptor del cerebro y encender el del corazón... Ya otros lo hicieron.

Vive.

-No entiendo por qué el cielo es azul, no entiendo por qué estamos aquí, no entiendo por qué los padres tienen ese amor incondicional hacia los hijos, no entiendo por qué cada vez caemos en el mismo fallo, no entiendo por qué nos quedamos en blanco con las cosas importantes, no entiendo por qué hay gente que ama la lluvia, no entiendo cómo puede haber amor a primera vista, no entiendo cómo vuela un avión, no entiendo por qué el olor a mar me fascina... no entiendo nada, ¿sabes?


-La vida no se entiende, simplemente se vive.

Seis olas y media.

"Un día me llego la historia de laindómita séptima ola, las primeras seis son previsibles y equilibradas, no deparan sorpresas,mantienen la continuidad.Seis intentos...y siempre el mismo destino...

Pero la séptima ola es imprevisible...A veces estalla,siempre ella, siempre la séptima.Porque es despreocupada, inocente, rebelde, barre con todo, lo cambia todo.Para ella no existe el antes, sólo el ahora.Y después todo es distinto, ¿mejor o peor? Eso sólo pueden decirlo quienes fueron arrastrados por ella, quienes tuvieron el coraje de enfrentarla, de dejarse cautivar"(Cada siete olas, Daniel Glattauer).

Querida felicidad,

Me pregunto qué estarás haciendo. ¿Dónde estás? ¿De vacaciones en un lugar idílico como las Maldivas? No hay otra explicación porque por estas tierras aún no te he encontrado... Tal vez te escondas, claro, pero ¿De verdad soy tan idiota como para no encontrarte? Ni que fuera una niña pequeña que busca su oso de peluche cuando lo tiene delante en realidad. No. No te escondes... ¿Llegarás por ti sola como dicen todos? Tampoco, menuda tontería... ni que fueras la maldita borrasca de pascua que siempre llega. Pero si no te escondes ni llegarás por ti sola, entonces ¿Que debe hacer alguien que está eternamente en tu búsqueda? Tal vez simplemente creer en la suerte de que algún día te encuentre en una isla del caribe, en el café de la esquina o el bar de todos los sábados... Quizás lo mejor sea creer en ti. O no, mejor dicho, no sólo creer sino saber que existes...  Ya sabes, ni que fueras Papá Noel.

Decídete :)

A veces nos precipitamos con las cosas que nos importan. Queremos no sólo dar un primer paso, sino recorrer todo el camino en medio minuto. No podemos esperar. Va! Corre! La vida se pasa. No esperes. Pero a veces no hace falta subir toda la escalera, basta con subir el primer peldaño. ¿Y si... no?

Defectos.

Todos conocemos a alguien singular que es bueno para nosotros. Pero cuando has tenido unas cuantas relaciones empiezas a sospechar que no es la persona adecuada, sino que tiene puntos defectuosos. ¿A qué se debe? Pues a que tú mismo eres defectuoso en algún aspecto y buscas parejas que lo son en otros complementarios. Pero él o ella ocupan una parcela de tu vida para crecer plenamente dentro de tus propios defectos. Hasta que no tropiezas con tus demonios más profundos -tus problemas irresolubles- no sabes cómo eres realmente, que estás preparado para encontrar un compañero para toda la vida. Solo entonces sabes lo que estás buscando. Tú estás buscando una persona defectuosa. Pero no cualquier persona defectuosa, sino la persona defectuosa «correcta», esa que miras con amor y piensas: «Este es el problema y quiero que lo sea». Yo busco esa persona especial que es inadecuada para mí precisamente de la manera correcta. (Andrew Boyd)

Perfect.

Me encantaría gritarte a la cara. Tan fuerte para que despertaras, ya. Hacerte recordar cómo era... cómo eras, cómo me hacías sentir, cómo estábamos nosotros. Esa felicidad, pura, completa, sin barreras. Pero claro, siempre hay algo imperfecto en las cosas que nos traen felicidad. Pero ¿no es eso lo que las hace valer la pena? Aquella pequeña imperfección, ese fallo. Nuestro fallo. ¿No te das cuenta de lo que dejaste pasar, por un fallo? Los fallos no siempre afectan a la perfección: La complementan. Pero no vale la pena ya gritar, es tarde. 

Supongo que la perfección también tiene una fecha de caducidad.

Big Fish.

"-¡Narcisos!
-Son tus flores favoritas.
-¿Cómo has podido encontrar tantas?
-He llamado a todas las floristerias de cinco estados,
les dije que era la unica manera de que mi esposa
se casara conmigo.
-¡Si ni siquiera me conoces!
-Tengo el resto de mi vida para conocerte."

Obstáculos

Me dijeron una vez que lo único que hace falta en esta vida es voluntad. La voluntad de seguir adelante, la voluntad de luchar por tus sueños, la voluntad de recorrer kilómetros de distancia por lo que quieres, la voluntad de alcanzar tus metas. Muchos dirán: Pero, ¿Y los obstáculos?, también están ahí, ¿no? Pues no. Los “obstáculos” que toman valor en nuestra vida, en realidad sólo son diminutas piedras sin importancia, no pesan, no tienen longitud ni tienes que recorrer distancias para evitarlos, no tienen medidas porque la importancia se la damos nosotros, en esa compleja red de engranajes que llamamos imaginación. Y la imaginación es infinita y por lo tanto los obstáculos también lo serán. Pero podemos manejar nuestra cabeza, ¿no? Podemos simplemente no otorgar importancia a los obstáculos y solo seguir nuestro camino, dejarlos de lado y pasar por encima de esas diminutas piedras. Podemos simplemente dejarnos guiar por nuestra voluntad. La voluntad de ser felices.

PD: Sísifo también subió la piedra una y otra vez por la colina, sabiendo que caería. Pero, ¿Y si un cierto día lo consigue?